lunes, 5 de febrero de 2007

Estoy segura

Que dentro de veinte años vamos a lamentar no haber disfrutado la ocasion, y lo sé porque pienso en las cosas que no hice con esa juventud y me hubiera gustado tener esta cabeza.
Extraña paradoja la de los humanos, entender en su dimension lo relativo de la vida, cuando las fuerzas para gozarla disminuyen.
Que poco sentido estar a treinta metros uno del otro, vos pensando en todo lo que me harias, yo pensando en todo lo que te haria si pudiera.
Y estar sentados hablando hasta gastar la lengua, hablando, por supuesto de experiancias pasadas, de sexo, siempre de sexo, porque es lo que queremos hacer, tener sexo.
Y conjurar demonios que no se van, hablando de lo que no hariamos.
Y el hilo se esta poniendo cada vez mas delgado, y es de lastima ver el malhumor y la frustracion que andamos cargando.
Porque ademas de ese deseo, que no nos permite siquiera saludarnos por miedo al cortocircuito, hay una especie de cariño.
Esquizofrenia andante hablarte del precio de una remera y escuchar en mi cerebro la voz que grita te quiero comer la boca, no te acerques.Peor cuando , por mas que no lo digas, tu pensamiento grita y yo te escucho.te engancho perdido en algun lugar mio, y yo me pongo los anteojos para que no mires cuanto te deseo, como acariciaria tu cuerpo hasta gastarlo.
Y mejor, este arte de hacernos los boludos, porque si llegamos a hblar de esto, vamos a terminar no hablando.

2 comentarios:

Danixa dijo...

¿Viste que hay canciones para cada momento? Como que a veces alguien ya sintió eso que sentimos y agarró y compuso un tema y uno lo escucha y dice: "Joder, lo entiendo". Ok. Yo te entiendo a vos en esto que contás porque así muy parecido me siento con G, uno que me quedó en el alma. Pero antes, sentí esa empatía con un tema de Fangoria... Si lo encontrás por ahí, adquirilo... Y mientras te dejo la letra (jajaj, voy a copiar la letra de una canción como si tuviera 15 años)... Se me ocurre que va a dar empatía.


Vimos pasar el cometa…
tumbados sobre la arena,
hablando de cosas,
que suenan trascendentes…
haciendo promesas,
que tú y yo sabemos que no hay que cumplir…

Vimos hundirse la noche…
en la distancia más corta,
robando los sueños
a la madrugada…
soñando despiertos
con que es más fácil lograr así un final feliz…

Y ahora me arrepiento,
de no haber sabido aprovechar el momento…
Y siento haber oído mi voz diciendo
que no importa nada, que son cosas de la vida,
que algún día lo olvidaríamos los dos…
Me odio cuando miento.
Me odio cuando miento.

Nos despedimos despacio,
para alargar el momento…
Siendo prudentes, por no decir cobardes…
Y apretando los dientes,
para no decir "yo me quiero quedar aquí contigo".

Y ahora me arrepiento,
de no haber sabido aprovechar el momento…
Y siento haber oído mi voz diciendo
que no importa nada, que son cosas de la vida,
que algún día lo olvidaríamos los dos…
Me odio cuando miento.

Me odio cuando miento.

Me odio cuando miento.
También cuando me mienten.
Mentiras que pretenden borrar los sentimientos...
Me odio cuando miento.

katza dijo...

que buena, gracias, y que justa.
Y si, repaso y digo mejor, no estamos preparados...que se yo.
Un abrazo y sigamos diiiiii