lunes, 12 de febrero de 2007

Y cuando

hablo de daños a terceros, me refiero primero a daños a mi misma, ergo, a vos.
Porque no te la bancaste, porque te sentiste solo y abrumado, porque me confundo con tu metro noventa y no me doy cuenta de cuanto sigo repitiendo.
Y es que a veces me hinchas las pelotas, te quiero independiente, resuelto, con las cosas claras: ahora quisiera saber como se hace cuando tuviste un padre esquizofrenico, una abuela alcoholica y una madre falopera, ademas de tantas mudanzas...
Lo cierto es que cuando decidi que te queria tener, pense que iba a ser otra cosa, que todo iba a ser perfecto, pero tenia veinte años y un pedo religioso en la cabeza, como todos los drogones de cuarta.
Y somos buenas personas, pero a veces no alcanza, y me esta preocupando tener que ponerme a caballito tuyo todavía.
La unica certeza es que te amo con toda el alma, y que no se como hacer para que entiendas algunos pequeños detalles...

2 comentarios:

Danixa dijo...

madraza no se es, se hace, y vos te lo hiciste, se nota sólo con leerte. Así que ya lo sos. Confiá en eso.
Odio dar consejos, se me encojen los dedos en el teclado pero, perdón, no puedo con mi genio, dejo escapar un "decile eso y listo". Va a alcanzar, al menos para empezar. Una mamá que se reconoce errada alivia y ayuda a un hijo en conflicto, te lo cuento como hija de una loca y, también, como madre algo cuestionable.

katza dijo...

gracias, me hace bien leerte.De verdad...